Un equipo de ingenieros y geólogos del Centro de Excelencia en Geotermia de Los Andes, CEGA, de la Universidad de Chile, lleva adelante un estudio de 18 meses para evaluar la prefactiibilidad de generar hidrógeno verde con geotermia en el fiordo de Aysén.
Cofinanciados por el Gobierno Regional y su Consejo, a través del Fondo de Innovación para la Competitividad, FIC 2024, los investigadores presentaron el proyecto a la comunidad de Puerto Aysén en la Casa de la Cultura de la Municipalidad, hasta donde llegaron científicos, estudiantes, integrantes de la sociedad civil y autoridades para conocer los detalles del trabajo que están realizando.
El objetivo principal de esta fase inicial del proyecto es evaluar la viabilidad técnica y económica de levantar una planta de hidrógeno verde que sea abastecida con energía geotérmica en el fiordo de Aysén.
El ingeniero civil y magíster en Geotecnia Nicolás Pérez, investigador de CEGA, ha viajado 3 veces a la Región de Aysén para estudiar en terreno los potenciales beneficios del arco volcánico que en el territorio del fiordo de Aysén está especialmente próximo al mar, lo que se traduce en una fuente de calor junto a una fuente de agua permanente: “Estamos estudiando las cenizas volcánicas y lo que queremos es encontrar qué cenizas volcánicas pertenecen a los volcanes Macá y Cay (Cisnes) que son los que nos interesan para este estudio. Y al final terminamos analizando todo lo que son los rellenos sedimentarios”.
Nicolás cuenta que lo que hacen es observar las capas y los estratos horizontales de la tierra donde hay arenas y rocas: “Cuando un volcán hace erupción a 50 o 100 kilómetros genera una gran columna de humo y de cenizas que se desplazan y se depositan en distintos lugares. Y de repente, por ejemplo, acá el volcán más cercano no está a más de 100 kilómetros y podemos encontrar pequeñas capas relacionadas con las soluciones volcánicas. Nosotros extraemos una muestra de estas capas y analizamos sus distintos componentes, los cristales, las roquitas, y al final es como hacer una prueba de ADN y saber de qué volcán proviene esa ceniza volcánica”.
Una de las variables más importantes de este estudio es la profundidad en que se emplaza la roca fundida debajo del volcán, un aspecto clave para la generación energía geotérmica: entre más somero está el calor es mejor para la geotermia.
Bruno Ortega, ingeniero civil mecánico del equipo CEGA, sitúa geográficamente la investigación: “Estamos en un punto muy cercano de Puerto Chacabuco hacia Ensenada Pérez, aproximadamente unos 10 kilómetros. Hay un punto interesante para generar electricidad y calor con geotermia y eso aprovecharlo para producir hidrógeno verde. El hidrógeno verde es un gas, combustible, se apellida verde por su sustentabilidad y por provenir de energías renovables. Y estamos investigando para que sea una opción factible y sustentable de reemplazo y cambio de matriz energética en la Región de Aysen. El hidrógeno verde al combustionar, al no tener molécula de carbono en su estructura no libera dióxido de carbono que es el principal responsable del calentamiento global. En segundo lugar, respecto de otras fuentes energéticas como la biomasa, no libera material particulado y en un tercer aspecto importante del hidrógeno verde es que es un vector energético. Al ser un vector energético, significa que es una energía que se puede almacenar y se puede transportar a distintos puntos de consumo.
Bruno cree que este estudio es una buena noticia para la Región de Aysén ”por su contexto energético regional actual y su matriz de consumo que es principalmente basado en el petróleo diesel y leña. En su aspecto de transporte sabemos que la Región de Aysén geográficamente es extensa y tiene muchos caminos entonces se ocupan muchos combustibles fósiles en transporte y el hidrógeno verde puede ser una opción sustentable para la matriz de generación eléctrica y para la calefacción residencial”.
El alcalde de Aysén, Julio Uribe, conoció los estudios geotérmicos de CEGA desde sus inicios en 2010 cuando era consejero regional y luego cuando presidía la Comisión de Ciencia: “Varios años después, los resultados aparecieron cuando yo era presidente del Consejo Regional y una de las termas que tenía mayor potencial geotérmico era la de Puerto Pérez. Y desde ahí quedó siempre ese encanto de poder solucionar nuestros problemas de energía, a través de la geotermia, pensar que hay países europeos que ocupan la geotermia desde 1900 y acá teniendo los potenciales no los hemos aprovechado. El producir energía a bajo costo significaría dejar la leña, tener una energía limpia, tal vez abrir la ventana a que se instalen industrias, las cuales necesitan mucha energía para funcionar. Esta no es una solución que mañana termina el estudio y comienza a haber electricidad. Estos son estudios base que nos van a permitir, tal vez en 10, 15 o 20 años más poder tener una solución. Pero hay que trabajar en ello porque sin estos estudios preliminares no podríamos llegar a un resultado como lo esperamos”.
Desde el Gobierno Regional de Aysén y su Consejo, respaldaron la iniciativa. Para la jefa de la División Fomento e Industria, Claudia Cantero, “la importancia tiene que ver con la toma de decisiones posteriores a este tipo de proyectos. La verdad es que para poder definir y diversificar la matriz energética de nuestra región, es importantes poder contar con proyectos y estudios que nos hablen de cuáles son las capacidades y las posibilidades y las potencialidades que tiene la región para poder generar otro tipo de energía. Por lo tanto, a través de este proyecto FIC lo que se está buscando es poder contar con más conocimiento y contar con más experiencia de otros lugares también y ver si se pueden aplicar acá en la región”.